martes, 5 de junio de 2012

Eso no me lo decía usted, antes

     No hay cosa mas tonta que querer agradar y quedar fatal. Y pasa mucho. En reuniones, encuentros de amigos y demás celebraciones tienes que hablar con gente que no has visto desde hace tiempo o que te presentan en el momento y se hace uno el agradable, se intenta quedar bien y se mete la pata con una facilidad pasmosa. Hablas por hablar, dices una tontería, te das cuenta o no, según tu inteligencia y te das la vuelta hacia otro corrillo a probar suerte con la oratoria, dejándote un individuo o grupo al completo, impertérrito y  ya chafado para todo el día.
     Con la edad y las relaciones es muy sencillo equivocarte y quedar como un perfecto idiota. En una ocasión ví atónita como un pardillo queriendo entablar conversación, le comentó a una señora que tenía un hijo muy simpático, cuando en realidad era su marido y mucho mas mayor que ella. Aún me pregunto como aquella buena mujer se mantuvo digna y no estrelló la copa que tenía en la mano y se tiró en ese instante, al cuello del dicharachero señor.
     Si se tiene una edad, una edad importante, es muy común que queriéndote alagar, te fastidien y que encima tengas que dar las gracias, si no, me cuenta usted, como se le queda el cuerpo cuando te dicen frases como “qué guapa estás para los años que tienes, hija” o “cuántas firmarían  por estar como tú, a tu edad” o la peor “qué bien te conservas” como si fueras una estatua o peor, una momia.
      Si estás guapa lo estás y punto, serás guapa madura, guapa anciana, o guapa adolescente, pero no sé es guapa a una edad y luego, según pasan los años te conviertes en horrorosa. Es como si sólo se pudiera estar bien, de 15 a 30, luego es conservar, remozar y apuntalar lo que tenias. Si lo consigues, te conservas bien, como Tutankamon
      Estos son los mejores cumplidos, los que te dicen sin mala intención porque luego están los de fastidiar, simple y llanamente, como ese casi grito “pero ¿qué te has hecho? ¡Estás fenomenal!” es decir que antes estabas de pena y ahora has pasado por el cirujano y a eso se debe tu apariencia, no estás bien por tus propios méritos sino por la ayuda del bisturí. Pura mala baba.
     También existe la frase tibia que no sabes cómo clasificar, la de ¡estás como siempre¡. Si la analizas puede indicar tres cosas: que has tenido cara de vieja, toda la vida; que estás igual que hace 20 años, cosa que es mentira e imposible, con lo cual te veían fatal entonces y tercera que es otro cumplido tontísimo.
     Según pasan los años las mujeres dicen que nos volvemos invisibles, estado que casi prefiero a que me mencionen lo de la conservación-congelación. Tenemos las arrugas que nos corresponden por vida y por genética, el cuerpo que podemos después de caminar 8 km a pleno sol, intentar seguir los pasos del supermoderno ejercicio, llamado  Zumba y comerte, después de tanto jaleo, un café con bollo.
     Estamos, como estamos, peor o mejor, pero por favor no me recuerden que hubo un tiempo que todo estaba en su sitio y en el que nadie remataba un piropo con lo de, para los años que tienes, porque entre otras cosas ya sé, la edad que tengo










6 comentarios:

  1. El pardillo tenía 40 años, barriga y era calvo?
    Lo bueno de los 50 es que cuando tenía 20 nadie me echaba cuenta porque era normal estar estupenda pero, y aquí está lo bueno, es una satisfación decir al pardillo que tengo 50 y ver la cara que se le queda.... Somos lo que somos y hacemos lo que podemos antes y ahora.

    ResponderEliminar
  2. A una amiga mía le pasó una vez algo así: "Señora, que se deja el niño en el coche" Y ella contestó "Es mi marido!" y al ver la cara de la otra pobre que no sabía dónde meterse, continuó "Pero no se preocupe, los hombres siempre nos hacen quedar mal", con lo cual, todo se zanjó con unas carcajadas de las dos.

    Los años (50) nos han enseñado a afrontar estas cosas con buen humor y sin complejos.

    En cuanto al aspecto, Toni tú siempre has estado estupenda, con la edad que sea, sobre todo por la alegría que desprendes. Eso siempre ha sido el mejor tratamiento rejuvenecedor.

    Un beso, y adelante con el blog!

    Susana

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta que participeis, que conteis cosas, que seais Una de 50

      Eliminar
  3. A mi ni antes...ni ahora, me decían nada

    ResponderEliminar
  4. Qué verdades... Es indignante oír eso de "qué bien te conservas" y comentarios del mismo jaez... Que no soy una caballa ni una sardina, señores, y no vivo en una lata. Ellos se ponen horrendos y se siguen viendo estupendos siempre. La vejez es selectiva y sólo nos ataca a las mujeres; ellos son inmunes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero nosotras, como dice el anuncio.... "Lo valemos" Gracias por leer a Una de 50

      Eliminar